Las tres intrépidas aventureras seguían por tierras madrileñas. Como Carrie y sus amigas por las calles en Nueva York pero con mucho menos glamour por el madrugón y con la cuarta componente en casa. Nos adentramos por Fuencarral: OMG! osease, Oh! My God!!! Qué de tiendas hay en Fuencarral!! Y nosotras con solo una hora para poder verlas. U_U Tras un consenso en una mesa redonda ficticia como caballeras decidímos varias normas:
1. Tenía que ser tienda que no hubiese en Sevilla o bien que fuese de mayor tamaño y variedad.
2. Además de ser una selección unánime de las tres.
Al final sólo nos quedamos con tres tiendas. MAC pro, Kiko y Lush (fui un poco golfilla, vendí todas mis votaciones por ir a lush).
Ya lo sé ya lo seeee, esa calle me la he recorrido muchas veces... Pero con lo apretados que son mis viajes nunca tengo tiempo de llegar a Lush. XD
En fin, comenzamos a caminar por la calle. Expectantes, observando los escaparates mientras no parábamos de parlotear. La primera en encontrarnos a la derecha fue MAC. No me hacía especial emoción entrar en esta tienda. Ya había ido un par de veces y su variedad no me deslumbra (me da a mi que tendría que contratar a un guardaespaldas por decir esto). Lo que no pensé es que a mis darlings les pasara lo mismo y al final esa visita fuese un suspiro. Chachiii, más tiempo para el resto de tiendas!!!!

Prueba tras prueba superada sin gastarme ni un urdel, conseguimos llegar hasta Lush. (On música celestial ♪ ♫ ♪ ♫♪ ♫♫♪) Oh lush!! eres mi isla perdida, mi tesoro escondido. Tantas veces apunto de llegar y tantas otras sin poder ni asomarme a la puerta. Pero no os preocupéis. Al fin llegué, ahí estaba, apunto de cruzar ese maravilloso umbral... por fin podríamos comprobar si toda su fama eran infundadas o realmente se merecía cada uno de sus elogios. (♫♪ ♫♫♫♪ ♫Off música celestial)
(On música intensa) O_O me ahogooooo!!!!! Apañeraaass esperadmeeeee!!! Nos disfrutéis sin miiii!!!! (Off música intensa) Si señoritas. Tengo un olfato tan agudo que los olores fuertes me marean. Y como ya sabréis por muchos vídeos de youtube... (on imitación chica youtube) Mmmmmmm que rico huele este jabóoonn!!!! (off imitación chica youtube). XD Comencé a verlo todo desde un tunel, mi vida se desvanecía mientras solo podía ver a Irene y Danui corretear como pequeñas hadas entre tantos aromas. Me muero y no podré comprar nada de la tiendaaa!!! Lushhhh ¿Por qué me pones estas pruebas tan duras?
Tras llorar por dentro y con una sonrisa grande por fuera (Una que es valiente y no quería enseñar su miedo a la muerte a Lush). Vino una simpática dependienta a socorrerme. Fue el momento más feliz, me trató como a una reina y los rumores de adorables dependientas no eran un bulo. Le expliqué que su tienda tenía un olor muy intenso y eso me mareaba. Así que se pegó a mi o yo a ella y me fue sacando los productos según mis necesidades sin tener que olfatearlos todos. Yupiiiiiii!!!! Iba a ganar la batallaaa!!!
En lo primero que piqué fue en algo maravillosisisisisisimoooo!!!! (como decía papuchi). No me llamaba la atención las barras de masaje, pero resultó ser lo que más me gustó. Normal, la chica me los fue probando sobre mis brazos. Vaya masajes que me hacía, ohhh si siiiiii sigueeeee!!! Esas eran mis palabras de placer y ánimo. XD Con esas manos podría probar todas las barras de masaje. Y hasta aqui puedo leer, eso mejor os lo cuento en la entrada especial que haré para Lush.
En fin, que me vendió cosas que no quería y cosas que si. Al final los rumores eran ciertos. Las dependientas eran muy amables y eran capaces de venderte hasta sal en el desierto. XD
Esto fue lo que compré: Por ahora solo os doy una pista que fue.^_^
Cada cual salió con una bolsa mayor que la anterior. Siendo la mía la más comedida, pero creed los que os digo: ni un ápice de remordimiento nos invadió cuando sacamos nuestras carteras. XD
Tras esta ardua búsqueda de nuestro producto estrella nos dimos cuenta de lo tarde que era. Y lo más preocupante, tenía tanta hambre que podría acabar con las reservas de todo un almacén. Menos mal que comí por los ojos y no por la boca todo lo que pude. Ya que el Macdonald´s Gran Vía fue nuestro destino y el Big Mac mi victima. Irene se contuvo algo más que Danui y yo pidiendo una ensalada en lugar de patatas fritas y Coca cola Zero en lugar de la Coca Cola clásica. No sé si ese momento fui la mas lista pidiendo o no, pero las patatas deluxe me supieron a gloria y la cocacolita con todas sus calorías y azúcares me sentaron de vicio. Después de todo teníamos una larga noche que afrontar y no estaba de más coger energía. ^_^
Tras llorar por dentro y con una sonrisa grande por fuera (Una que es valiente y no quería enseñar su miedo a la muerte a Lush). Vino una simpática dependienta a socorrerme. Fue el momento más feliz, me trató como a una reina y los rumores de adorables dependientas no eran un bulo. Le expliqué que su tienda tenía un olor muy intenso y eso me mareaba. Así que se pegó a mi o yo a ella y me fue sacando los productos según mis necesidades sin tener que olfatearlos todos. Yupiiiiiii!!!! Iba a ganar la batallaaa!!!
En lo primero que piqué fue en algo maravillosisisisisisimoooo!!!! (como decía papuchi). No me llamaba la atención las barras de masaje, pero resultó ser lo que más me gustó. Normal, la chica me los fue probando sobre mis brazos. Vaya masajes que me hacía, ohhh si siiiiii sigueeeee!!! Esas eran mis palabras de placer y ánimo. XD Con esas manos podría probar todas las barras de masaje. Y hasta aqui puedo leer, eso mejor os lo cuento en la entrada especial que haré para Lush.
En fin, que me vendió cosas que no quería y cosas que si. Al final los rumores eran ciertos. Las dependientas eran muy amables y eran capaces de venderte hasta sal en el desierto. XD
Esto fue lo que compré: Por ahora solo os doy una pista que fue.^_^
Cada cual salió con una bolsa mayor que la anterior. Siendo la mía la más comedida, pero creed los que os digo: ni un ápice de remordimiento nos invadió cuando sacamos nuestras carteras. XD
Tras esta ardua búsqueda de nuestro producto estrella nos dimos cuenta de lo tarde que era. Y lo más preocupante, tenía tanta hambre que podría acabar con las reservas de todo un almacén. Menos mal que comí por los ojos y no por la boca todo lo que pude. Ya que el Macdonald´s Gran Vía fue nuestro destino y el Big Mac mi victima. Irene se contuvo algo más que Danui y yo pidiendo una ensalada en lugar de patatas fritas y Coca cola Zero en lugar de la Coca Cola clásica. No sé si ese momento fui la mas lista pidiendo o no, pero las patatas deluxe me supieron a gloria y la cocacolita con todas sus calorías y azúcares me sentaron de vicio. Después de todo teníamos una larga noche que afrontar y no estaba de más coger energía. ^_^
![]() |
El maquillaje brilla por su ausencia |
Bueno chicas. Hasta aquí Crónicas Madrileñas II. Mañana más XD Qué queda para rato. Besitoooossssssssss